#NUNKINÍ #Calkiní | Como cada año en esta temporada, el
paisaje en el acceso principal de esta comunidad de Nunkiní se viste de gala
con la vibrante floración del árbol de flamboyán (Delonix regia), cuyas flores
rojizas iluminan la carretera que conecta con la ciudad de Calkiní, dejando una
estampa natural que asombra a quienes transitan por esta vía. Desde el inicio
de junio, los árboles han comenzado a mostrar todo su esplendor, cubriendo sus
copas con un manto rojo encendido que contrasta con el azul del cielo y el
verde del entorno. Esta imagen, típica de la temporada, ha despertado elogios
entre automovilistas, ciclistas y peatones, quienes no dudan en detenerse para
capturar la belleza del momento.
“Es un deleite pasar por aquí en estos días. Los flamboyanes dan la bienvenida a Nunkiní de una forma espectacular, como si fuera una alfombra natural para los visitantes”, expresó don Evaristo Chi, conductor del servicio colectivo en la ruta Nunkiní-Calkiní. El camino que une a ambas comunidades no solo cumple una función vial, sino que se convierte en una especie de corredor ecológico, donde los flamboyanes juegan un papel protagonista durante esta etapa del año. Su floración no solo representa un deleite visual, sino que también simboliza la llegada del verano y el inicio del ciclo agrícola en la región.